Hoy te quiero hablar de una enfermedad muy grave, mucho más que el COVID, aunque te parezca imposible, porque para esta no hay mascarilla que valga, ni vacuna, ni distancia que proteja a quien la tiene, esta enfermedad lleva con nosotros toda la vida.

Quien la padece se corroe por dentro y lo que es peor destruye todo a su paso.

Si la padeces no te dejara vivir con alegría, si la padece alguien a tu alrededor te restará la tuya.

Esa enfermedad de la que te hablo es la envidia.

La envidia no siempre es por lo material, a veces la gente siente celos por tu personalidad, tu espíritu, tu energía, tu esfuerzo y tus ganas de superarte.

Y te quiero hablar de ella para que te protejas si alguien a tu alrededor la padece o para que le pongas freno si te sientes identificada con ella.

¿Cómo son las personas envidiosas?

Definición de envidia: es un sentimiento de tristeza o enfado que se produce al desear algo que otra persona posee.

Es definida como el sentimiento o estado mental que produce dolor y desdicha, por lo que tiene el otro en talento, inteligencia, éxito, dinero, cualidades sobresalientes, belleza o suerte, entre muchas otras cosas. También es “el pesar o la amargura que siente una persona cuando a su prójimo le va bien”

Diversos expertos defienden que la envidia puede presentarse no como un sentimiento puntual generado por una situación concreta, sino que puede llegar a tratarse de un rasgo de la personalidad.

¿Qué es lo que causa la envidia? 

Además de la baja autoestima y la constante comparación con los demás:

  1. Falta de valoración personal y amor por uno mismo.
  2. Son personas infelices por qué no son agradecidas y no disfrutan con nada de lo que les pasa, de lo que tienen, de lo que viven.
  3. Quieren lo del otro, siempre desean lo de los demás, aunque tengan mucho de otras cosas, querrán lo que tú tienes…hasta extremos increíbles, como tener envidia de tu enfermedad, por qué solo ven la atención de los que te rodean.
  4. Personalidades egocéntricas.
  5. Te culparán de todas sus desgracias, porque es mucho más fácil que responsabilizarse de sus actos.
  6. Personas narcisistas, antisociales y exageradas.
  7. Ellas siempre tienen mala suerte, su vida es un horror y lo del otro es suerte.
  8. Personalidades neuróticas e inmaduras.
  9. Van de víctimas, de “Pobre de mí”, son vampiros emocionales que te chupan tu energía.
  10. Personas que actúan impulsadas por la ira. En los casos más graves pueden llegar a la agresividad y a la violencia, tanto verbal como física. 
  11. Personas bloqueadas por miedos, conflictos y contradicciones.

Su autoestima es tan baja, sus complejos tantos y tan grandes que pueden ser maltratadas por otros vampiros emocionales; pero

 ¡¡¡Cuidado!!!! Se irán al otro lado en cuanto vean una presa y se convertirán en verdugos para machacarte.

La envidia va tan flaca y amarilla porque muerde y no come. – Francisco de Quevedo

Así que es bueno tener a las personas envidiosas identificadas para que no te hagan daño.

La envidia es un sentimiento que puede perdurar a lo largo del tiempo por el desconocimiento de cómo manejarlo.

Las personas que no son capaces de controlar este sentimiento pueden manifestarlo en forma de críticas o comentarios descalificadores, así como injuriando o incluso rechazando al otro.

Ten mucho cuidado con estas personas a las que llaman tóxicas, ya te he dicho que pueden llegar a ser agresivas y violentas, en un ataque de envidia su ira es tan incontrolada que son capaces de hacer daño a su propia familia.

La envidia es la úlcera del alma. – Sócrates

No esperes

No esperes que sean empáticas, siempre le parecerá que lo suyo es peor y son incapaces de ponerse en el lugar del otro.

No esperes que te apoyen en tu camino a conseguir tu logros.

No esperes que se alegren de tus éxitos.

La envidia suele ir aderezada de celos que parece lo mismo, pero no lo es.

La envidia es causada por ver a otro gozar de lo que deseamos; los celos, por ver a otro poseer lo que quisiéramos poseer nosotros. – Diógenes Laercio

La envidia y los celos no son vicios ni virtudes, sino penas. – Jeremy Bentham

Qué hacer con las personas envidiosas
  1. Aléjate de la gente envidiosa. Recuerda que, si alguien te tiene envidia, es su problema. Tú no estás haciendo nada mal y no debes dejar que esto te afecte. Y no se te ocurra sentirte culpable.
  2. Examina su comportamiento. Puedes darte cuenta de los sentimientos de alguien al observar su forma de reaccionar, no solo en palabras sino también con expresiones corporales o gestos faciales.
  3. Descubre qué hizo que esa persona sea así. ­Todas las personas son un universo distinto, con dudas, carencias y experiencias de vida únicas.
  4. Céntrate en algo más productivo, en lugar de tratar de responder a las acciones de la persona envidiosa. Si no necesitas compartir el mismo lugar con la persona envidiosa, entonces la mejor cosa que puedes hacer es lo mismo que con el cáncer: ¡aplicar principios de detección y eliminación!
  5. Abandona toda la interacción con la persona envidiosa, tan pronto como te sea posible. Esto puede parecer una manera difícil de tratar con ella, ¡pero es la única forma para que te salves de muchos dolores!
  6. Si por las circunstancias estás obligado a permanecer en un mismo lugar con una persona que tiene envidia de ti, trata de reducir la interacción con esa persona al mínimo necesario.
  7. Y asegúrate de no estar involucrado en ninguna cooperación con la persona envidiosa en cualquier actividad que sea importante para ti.

Si te estas reconociendo en lo que estas leyendo como una persona envidiosa tengo dos cosas que decirte, una mala y una buena.

La mala es que es un camino duro y difícil, la buena que es posible, que está en tus manos y que tú eres quien decide dejar de sufrir y vivir con alegría.

La envidia es un veneno que hay que aprender a gestionar.

La envidia puede ser como un bicho en tu hombro que te susurra palabras al oído para recordarte lo poco que tienes en tu vida y lo mucho que tienen los demás.

 

El silencio del envidioso está lleno de ruidos. – Khalil Gibran

Cómo superar la envidia:

✔ Deja de compararte con los demás. Compárate contigo mismo

La envidia siempre surge con la comparación de uno mismo; si no hay comparación, no hay envidia. – Francis Bacon

Si te comparas contigo mismo siempre ganarás. Mira cómo has crecido y todo lo que has logrado. Valora todo lo que has hecho y lo que tienes. Mira todo lo lejos que has llegado y planea qué vas a hacer para seguir avanzando.

Con esta mentalidad siempre saldrás ganando. Da igual que los demás tengan mucho o poco, lo importante es lo que tenías antes y tienes ahora.

✔ Deja de juzgar

Quizá no estés donde querías estar ni tengas lo que esperabas tener. Eso ni es bueno ni es malo. En lugar de juzgar piensa en lo que tienes, en lo que quieres, y en qué puedes hacer para conseguirlo. 

No existen las cosas buenas o malas, existe lo que tienes y lo que quieres, y lo que lo separa es lo que tienes que hacer para conseguirlo.

Nadie que confía en sí, envidia la virtud del otro. – Cicerón

✔ Hazte responsable de tu vida.

El responsable de que estés donde estás eres tú. 

Tienes la formación, experiencia y coraje que necesitas para conseguir todo lo que te propongas, fijarte en los demás hace que no avances tú. 

Cuando veas todo el potencial que tienes en ti mismo ya no estarás enfrentado a los demás. 

 Lo que tienes o dejas de tener es responsabilidad tuya. 

✔ Pregúntate

¿Cómo es tu autoestima?

Las personas con baja autoestima que no se aceptan y no se respetan terminan por sentir envidia de los otros, pues ellas no consiguen ser quienes realmente quieren.

Respetarse y aceptarse es la clave para no sentir envidia de lo que son o poseen los otros. 

¿Cuál es tu nivel de autoexigencia?

Las personas muy exigentes consigo mismas, que utilizan de forma constante la autocrítica, nunca terminan de estar satisfechas con sus éxitos o logros, siempre tienden a compararse con los otros y por supuesto siempre considerarán que les quedarán cosas por conseguir. Cuidado con la perfección.

¿Tienes miedos o temores?

Aquellas personas que tienen miedos, terminan siendo limitados por los mismos, viven en continuas contradicciones entre lo que quieren y quizás no se atreven a hacer.

Conocer y trabajar nuestros miedos nos ayudará a que estos no sean una limitación, evitando así la tendencia a compararnos con los otros.

¿Vives con alegría? ¿Eres feliz?

Descubre que te da alegría, con que disfrutas, que te hace  feliz, reconoce y asume las limitaciones que pudieras tener para conseguir tus objetivos y marca unos más realistas, que te permitan disfrutar y sentirte bien contigo mismo, contigo misma.

Si la envidia es reconocida y expresada se puede llegar a gestionar y dirigirla hacia un fin positivo.

Es importante aprender a expresar y reconocer los propios sentimientos.

Lo primero es explorar tu historia para entender de dónde viene ese sentimiento de inferioridad. Trabajar esto te ayudará a librarte de tu sentimiento de inferioridad, dejar de compararte y tomar las riendas de tu vida, brillando con luz propia sin tener que apagar la luz de los demás.

Tu autoestima y la relación con los demás se verán beneficiadas.

En segundo lugar, aprende a aceptarte y a amarte. En lugar de querer destruir al otro o pensar que no es justo que él sí lo tenga y tú no, recoge toda esa energía que malgastas en odiar y destruir y enfócala en sacar fuerzas para llevar a cabo tu propio proyecto, Para construir y conseguir tus Sueños.

Busca ayuda de un profesional para que te acompañe en el camino.

La envidia puede presentarse de muchas formas distintas, e incluso llegamos a hablar de envidia sana cuando esta se presenta sin rabia y se convierte más bien en una especie de admiración hacia otra persona.

Creer que necesitamos lo que otros poseen o vivir las mismas experiencias para ser felices, para sentir Alegría de Vivir, es un error que nos hace estar siempre buscando en la vida de los demás nuestra propia alegría.

Tener esta “creencia” nos descubre que no tenemos unos objetivos propios, un proyecto de vida.

Es mucho más cómodo vivir en la queja por no tener la misma suerte que los otros que trabajar y poner empeño en alcanzar lo deseado.

Hay muchas personas en las que reconocer un modelo a seguir; una fuente de inspiración para nuestro proyecto personal; alguien de quien aprender, alguien a quien Admirar, en lugar de alguien a quien envidiar. 

Busca tus referentes, personas a las que admiras, seguro que tienes muchas y fíjate en ellas para ponerte METAS, cumplir LOGROS, hacer realidad tu propios SUEÑOS no para envidiarlas, sino para admirarlas y seguir sus pasos.

Haz una lista de esas personas, de las cosas que admiras de ellas y ponte las pilas si quieres vivir como ellas.

Porque seguro que su camino no ha sido gratis.

 

Nuestra envidia siempre dura más que la felicidad de aquellos que envidiamos. – Heráclito

 

                ¿En que te puedo ayudar?

 

 

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30 comentarios

  1. Toma ya! Qué razón en que hay personas envidiosas que piensan que el resto tiene la culpa de su desgracia o que tienen más suerte que ellas. Desde hace muchos año tengo claro que los logros no llegan por la suerte, sino por el esfuerzo y el atrevimiento.
    Ana, eres una de las personas que admiro. Sigue así 😘

    1. Qué bueno que lo tengas claro y que cada día te afecte menos.
      Gracias!!! sabes que tú también estas en mi lista.😍😘

      1. Buenos días!! Ana. Que rebien lo has contado!!. Según iba leyendo me he ido acordando de la gran cantidad de personas a mi alrededor que son envidiosas y me producen mucha pena pues malgastan su tiempo en pensar sobre lo que hacen los demás. Mi lema siempre ha sido VIVE Y DEJA VIVIR. . Un abrazo muy grande.

        1. Qué buen lema, me encanta!!
          y si en ese vivir aportas algo al mundo, chapo😊🥰
          Un abrazo grande, grande😍

  2. Creo que en la sociedad actual es muy importante reflexionar sobre este sentimiento, ya que ahora más que nunca con las redes sociales ( viajes, logros, belleza…) nos comparamos a diario con otras personas haciéndonos sentir infelices sin necesidad. Gracias Ana por hacernos llegar esta reflexión tan positiva y ayudarnos cada día a vivir con alegría.

    1. Tienes toda la razón, cada vez miramos más por esa ventana para pensar que los otros tienen más y mejor y sentirnos infelices.
      Miremos nuestros logros, lo que tenemos a nuestro alrededor y seamos agradecidos.
      Gracias a ti, por leer y comentar.
      Un abrazo💜

      1. Que buena reflexión. En el mundo en el que vivimos es necesario mirarse para dentro y reflexionar sobre nuestros miedos, nuestros bloqueos…. Sólo decirte gracias por tus palabras y por todo lo que aprendo.

        1. Reflexionar y ponerse en acción si queremos cambiar y/o mejorar algo y agradecer, en eso tú eres experta.😍
          Gracias por estar y apoyarme en el camino💜
          Sabes que estas en mi lista😉

  3. qué bien dicho. pero mi opinión personal es que hay una envidia sana y es cuando conoces a alguien y la admiras , te gusta como es y lo que hace y sabes que tú no lo vas a conseguir ni de broma y la envidias , pero no te afecta a tí, al contrario, la admiras por lo que ha conseguido. enhorabuena.

    1. Claro!!! la admiración es muy sana.
      Si crees que no lo vas a conseguir, ya empiezas mal🤔😊
      Bueno, cada una tenemos unos talentos y unas limitaciones, conocerlas y aceptarlas también es bueno, la diferencia es que te alegras por esa persona y como te dices no te afecta a ti, ni la atacas a ella.
      Un abrazo enorme💜

  4. Felicidades en primer lugar por tu crecimiento espiritual, personal y profesional. En segundo lugar muchas gracias por compartirlo. Sobre el tema en cuestión. Es cierto que es una enfermedad para quien la padece, la envidia. De muchas personas que la padecen y que tenemos alrededor es fácil alejarse porque la mayoría de ellas no son importantes en nuestra vida. El problema es mayor cuando viene de alguien cercano y querido. Es cierto que las personas así son tóxicas y te hacen sentir mal de alguna manera pero como bien dices, es una enfermedad y como tal debería ser tratada.
    Que viva la gente limpia y de alma blanca y que el amor sea el motor principal que nos mueva y la alegría y el buen hacer! 😘 😘 Un beso “consuegri” 😉

    1. Viva!!!!
      Sí, lo más duro es cuando esa persona es cercana y querida.
      Sé de lo que me hablas, por desgracia por experiencia 😰
      Gracias!! siempre serás mi “consuegrí” amiga☺😍

  5. Así es…así son, así sienten y así sufren las personas con envidia. Les lleva a distorsionar la realidad, a hacer juicios constantes buscando ese sesgo que les de la confirmación de lo que piensan. Hay que alejarse de ellas sí, pero también creo que hay que ser compasivas porque algo en su tipo de apego en la infancia, su autoestima como bien dices, el desconocimiento de sus virtudes y cosas buenas hacen que sean así. La inteligencia emocional ayuda a desarrollar destrezas para manejar este tipo de relaciones.
    Hace poco leí algo muy acertado sobre esto y decía: ” LA GENTE QUE APLAUDE VICTORIAS AJENAS, ES GENTE QUE YA TRIUNFÓ POR DENTRO”.
    Muy buen trabajo Ana, qué bien sabes hacer esto!!!
    Un abrazo al corazón 😘

    1. Qué sabia y experta en inteligencia emocional eres compañera.
      Maravillosa reflexión desde el corazón y la mayor empatía.
      Gracias por esa genial frase y por tus piropos.
      Un abrazo al corazón😘

  6. Hola Ana, gracias por este post, es muy interesante y nos hace reflexionar y pensar si realmente tenemos envidia o celos.
    En mi caso, humildemente creo que no soy envidiosa ni celosa, al contrario siempre me alegro de los logros de los demás y si son allegados míos, además presumo de ello.
    Pero si es cierto que a veces siento envidia sana, pero no como algo negativo, sino como objetivo para poder conseguirlo si realmente me interesa .
    Un saludo .

  7. Jo Ana, chapo, que buen explicado…mis hijos si se comparan o comparan nuestra casa y me pone mala…sabes? voy a reenviarles el post. Creo que no hay nada más bonito que alegrarse de lo que consiguen tus amigos y celebrar con ellos. Siempre he dicho empatía , este mundo necesita empatía y se acabaría la envidia.Yo te admiro muchísimo, es increíble lo que haces. Y he de confesar que esa sonrisa que tenéis algunas personas que ilumina, si la envido…pero de repente me doy cuenta que no la envidio que me encanta disfrutar de esas sonrisas pq iluminan mi camino.Me planteé hace poco y a veces si no tengo la vida que quiero y quiero realmente otra cosa, es más de hecho me esforcé porque mi vida es muy simple, tenía que querer hacer algo, sino no era normal, pero es que no lo encuentro…y descubrí que es porque ahora mismo hago lo que quiero, simple, pero es lo que quiero. A veces nos empeñamos en querer hacer grandes cosas porque los demás lo hacen y nos comparamos y nos nubla la envidia y no nos deja disfrutar de lo que tenemos.y es un error lo importante es ser feliz y ya está…ahora mismo disfruto de mi gente y de mi…pero me ha hecho pensar y reflexionar tú post….porque a mis hijos a veces les comparo y empiezo a entender…besos

    1. Guauuu Isabel que buena reflexión.
      Ojalá también les sirva a tus hijos, los adolescentes están en un momento muy critico, en especial por las redes.
      Me alegro de que te hayas dado cuenta que las cosas pequeñas y simples a veces son las grandes cosas de la vida.
      La magia no es la sonrisa de las personas, es que los demás se den cuentan y brillen con ellas.
      Cómo la luna brilla gracias al sol.
      Gracias por disfrutar de mi sonrisa y acompañarme en el camino.
      Un abrazo enorme💜

  8. Gracias Ana, qué buena reflexión, siempre he pensado que la envidia es una “enfermedad” que destruye al que la siente y al envidiad@ y que nada tiene que ver con Admirar a otro ser humano y querer mejorar la versión de uno mismo.
    Te admiro mucho por ser una persona muy especial que transmite mucha luz.
    Un besote grande 😘💖

  9. Muy bien explicado. Yo tengo muy cerca de mi a alguien así, dice no ser envidiosa pero cree que en la vida ella tiene mala suerte y el resto no. La verdad que te absorven tu energía y te dejan bastante tocada. Además, he crecido viendo ese sentimiento y yo también lo he sentido muchas veces. Te hace realmente infeliz y sufrir mucho. Como siempre te digo, gracias por ponerle nombre y describir sentimientos tan difíciles. Para mí eres un referente, ver lo que has conseguido me anima a luchar por lo que yo quiero conseguir… Y sin nada de envidia, te lo aseguro 😍😍😍

    1. Ayyy que alegría que os sirva de motivación😍
      Claro que sí campeona, a por tus sueños!!!
      Eres una curranta y estas haciendo un trabajo personal duro y muy bonito.
      Gracias por tus palabras.
      Un abrazo enorme Bella💜

  10. Acabo de leerlo…
    Con lo bonito que es alegrarse de lo bien que le va al de al lado y sentir admiración por algunas personas e intentar superarse a uno mismo…
    Aunque creo que es inevitable compararse con los demás… eso si, mientras no nos limite y no sirva para hacernos de menos… 🤷🏻‍♀️

    1. Tan bonito alegrarse!!! y nos llena tanto.
      Es cierto, a veces es difícil no compararse, que bueno que lo usemos para mejorar.
      un abrazo enorme 😊

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